Macramé al arte de hacer nudos decorativos. El arte del macramé es un Tejido hecho a mano con hilos o cuerdas gruesos que se trenzan o anudan y cuya estructura se parece al encaje de bolillos.
Macramé al arte de hacer nudos decorativos. El arte del macramé es un Tejido hecho a mano con hilos o cuerdas gruesos que se trenzan o anudan y cuya estructura se parece al encaje de bolillos.
El calor ha llegado para instalarse y es el momento de abrir ventanas y puertas para que el interior del hogar se llene de luz. La decoración en esta época del año cambia radicalmente.
Es el momento de guardar las mantas, así como los tejidos gruesos y de colores apagados. La casa se llena de cortinas ligeras, tejidos claros con estampados florales y luz, mucha luz.
Además, si quiere estar a la moda en lo que a decoración veraniega de su hogar se refiere, esta temporada en las estancias de su casa no pueden faltar los platos de cerámica y los objetos decorativos hechos de macramé.
Decorar las paredes con platos de cerámica fue tendencia hace muchos años, y quizá haya a quien le suene anticuado.
Sin embargo, las tendencias decorativas están recuperando este elemento, adaptándolo a los estilos modernos.
Los platos de cerámica son elementos muy bonitos, decorados con todo tipo de imágenes, colores y texturas.
Si los combinamos y disponemos de formas creativas, pueden transformar por completo el aspecto de una estancia.
La clave está en aprovechar la inspiración clásica y retro que puedan aportar los platos sabiendo adaptarlos a un estilo más moderno.
Las paredes decoradas con platos de cerámica encajan a la perfección dentro del estilo shabby chic, vintage y naïf.
Para colocar los platos, le recomendamos que primero dibuje sobre papel cómo piensa disponerlos.
Eligiendo si desea hacer conjuntos heterogéneos u homogéneos en función del color, la forma o el diseño.
Puede utilizar platos de diferentes estilos pero de un mismo color, como el blanco, que aporta una unidad.
Combine platos de colores en los mismos tonos, algunos de colores lisos y otros con estampados.
Pero dentro de la misma gama cromática.
Una vez tenga preparado el diseño, coloque la plantilla con el contorno de los platos sobre la pared.
Y por medio de adhesivos, alcayatas o algún otro medio que escoja, proceda a fijarlos bien en su sitio.
A la hora de escoger los platos, puede utilizar solo vajillas antiguas o solo piezas modernas, o mezclar ambas.
Incluso puede combinar platos sin ningún orden para diseñar mezclas eclécticas.
Otra opción es mezclar los platos de cerámica con otros elementos decorativos de pared, como cuadros.
Puede transformarlos colocando dentro fotografías o palabras, enmarcarlos o pintar figuras a su alrededor.
Es hora de acabar con la idea de que los platos solo sirven para colocarse en la mesa, o guardarse en el armario.
Y que colgar platos de cerámica en paredes no es anticuado.
La decoración con platos vuelve con más fuerza que nunca.
Y nos anima a combinarlos sin miedo y a reutilizar piezas a las que no dábamos uso.
Otra tecnica artesanal antigua es decorar con objetos de macramé.
Los objetos realizados con macramé eran un elemento decorativo habitual en las casas hace algunas décadas, hasta que comenzaron a considerarse pasados de moda.
Actualmente esta sencilla técnica de tejer cuerda haciendo nudos a mano despunta de nuevo gracias al amor por la tendencia vintage.
Además, el hecho de que pueda hacerlo usted mismo encaja a la perfección con la corriente DIY .
Y por su aspecto rústico-hippie, resulta idóneo para aportar un toque boho chic a su hogar.
Así pues, el macramé ha vuelto para dar personalidad a cualquier espacio, ya sea recubriendo maceteros, jarrones o sillas, así como a modo de alfombra, tapiz o cortina.
Esta técnica comprende más de 50 tipos de nudos diferentes, que pueden combinarse entre sí y hacerse con una amplia gama de materiales, principalmente fibras naturales (seda, algodón, yute, lana, etc.) en muchos colores.
Puede encontrarle muchas ubicaciones diferentes y encajará especialmente bien con elementos decorativos naturales, como la madera o los muebles de fibras vegetales.
Sin embargo, hay dos usos para el macramé que están destacando en la decoración contemporánea: como portamacetas y como tapiz.
Utilizar colgados de macramé como portamacetas refuerza el elemento boho chic en la decoración de cualquier estancia, máxime cuando el uso de plantas es una de sus bases.
Colgados de las paredes o, sobre todo, del techo, son originales y una forma fácil de integrar elementos verdes en nuestros interiores.
Se puede colocar en su interior, además de una maceta, una botella de cristal o incluso una pecera, que puede contener plantas colgantes, flores cortadas, piedras, terrarios, velas, etc.
Por su parte, los tapices realizados en esta técnica con diversos materiales, en muchos colores y adornados con todo tipo de abalorios, son una forma creativa de decorar cualquier pared.
Su gran versatilidad de formas, tamaños y tonalidades garantizan que pueden encajar en cualquier estancia aportando un toque étnico o hippie al hogar.
Las posibilidades son muchas, así que anímese a usarlos como cortinas, como cabeceros de cama o a modo de cuadros.
Esperamos que este artículo haya sido de su interés, y le sirva para animarse a decorar su hogar este verano con platos de cerámica y objetos realizados con macramé.
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Boho chic es un estilo de moda en interiorismo. El estilo Boho Chic que proviene, como su nombre indica, del estilo bohemio más puro, un estilo colorista, vital y ecléctico, que toma referencias de otros como el étnico o el colonial, basados en el folclore de culturas africanas, sudamericanas o asiáticas.
El boho más puro se define por el abundante empleo de colores saturados y oscuros en paredes y mobiliario. No obstante, el término chic supone un matiz añadido de elegancia frente al original, fusionando elementos de forma más sutil y ordenada.
Si es usted una persona de espíritu libre y apasionado, sin duda éste es su estilo decorativo. Tome buena nota porque vamos a contarle qué elementos son fundamentales para conseguir un perfecto y armónico estilo Boho Chic en su hogar, donde piezas antiguas, muebles reciclados y objetos étnicos podrán mezclarse con total libertad.
En primer lugar, para un perfecto estilo Boho Chic en su casa es necesario que apueste por el uso estratégico del color.
Tanto en mobiliario como en elementos decorativos, priorizando los tonos neutros y suaves en paredes y suelos para potenciar la luz natural.
Por ello, a la hora de pintar las paredes, desde La Casa de Pinturas le recomendamos que recurra al esmalte sintético.
Disponible en gran variedad de colores como beige, crema, marfil, gris suave, etc.
Es una pintura con una base de aceite, que cubre mucho y es muy duradera, además es resistente al agua y a la humedad.
Asimismo, también puede optar por el esmalte acrílico que no amarillea, es resistente al moho, seca rápido y retiene de forma excelente el color.
Una vez escogido el color neutro de las paredes, es el momento de elegir un mobiliario y unos complementos coloridos.
Decántese por pocos muebles pero de gran tamaño, preferentemente de madera, de línea sencilla y compacta.
El estilo Boho Chic también permite incluir elementos labrados de aire asiático o africano, aunque conviene no abusar de ellos para mantener un ambiente equilibrado.
También puede añadir muebles de estilo vintage, antiguos (cuanto más usados mejor) o de forja.
Si quiere conseguir un estilo Boho Chic auténtico, le aconsejamos mesillas elija baúles o cómodas de baja altura.
Las sillas en materiales naturales como el mimbre o el ratán, para crear rincones de lectura.
Pufs de cuero o esparto y grandes almohadones de algodón acompañando mesas bajas para crear zonas de relax.
En baños y cocinas el alicatado cobra mucho protagonismo, especialmente en coloridas geometrías.
Lavabos y fregaderos de estilo clásico o vintage encajan perfectamente en este ambiente.
Y recuerde que el estilo boho es amante de amplios espacios, evitando tabiques o puertas.
Añade muebles bajos o textiles como las cortinas de macramé o los paños de algodón o seda.
Tapices, alfombras, flecos o cortinas son indispensables adornando paredes y ventanas en la decoración Boho Chic.
Los colores que priman en este estilo son rojos y naranjas, pero también se usan mucho los morados, azules, grises, burdeos y marrones.
En el estilo Boho Chic es muy frecuente el uso de tapices, especialmente en las camas y en los cabeceros.
Igualmente no pueden faltar las alfombras de estilo persa o con estampados de estilo étnico, motivos geométricos aztecas o motivos florales tropicales.
En la versión más chic del estilo bohemio no pueden faltar tampoco elementos decorativos como los espejos artesanales.
Existen multitud de opciones para decorar con espejos.
El espíritu bohemio suele decantarse por los de gran formato, con marcos labrados y de inspiración marroquí o asiática.
La iluminación bohemia tiene un encanto muy especial.
Añada lámparas de cristal en formato pequeño y de diseño artesano, como las de vidrio soplado.
Combinar lámparas colgadas a diferentes alturas para crear rincones mágicos.
Así como el empleo de farolillos a pie de cama o junto al sofá.
Si le gusta decorar con cuadros, sólo cuelgue los de gran tamaño, el resto apóyelos simplemente en estanterías o mesas.
Si hay un accesorio decorativo que no puede faltar en este estilo son los toques tribales en el ambiente.
Usar composiciones de máscaras o cráneos de animales de resina sobre paredes neutras, sobre el sofá o junto al comedor.
Y, por supuesto, no dude en colgar de la pared sus recuerdos.
Todo sirve: platos, esculturas de madera, cuadros, piezas de cerámica, etc.
Para finalizar, no olvide la importancia de las plantas en la decoración Boho Chic.
Colgarlas en redes de macramé, en macetas o en el suelo, si son de gran formato.
Empleen muchas y variadas, haciendo que cualquier estancia sea un pequeño bosque de plantas.
Esperamos que este artículo le sea de utilidad a la hora de decorar su hogar al más puro estilo Boho Chic.
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