MASILLA PARA TAPAR IMPERFECCIONES

Si vamos a restaurar  o simplemente deseamos mantener los muebles de madera de nuestro hogar, la masilla para madera es un elemento fundamental para realizar un buen trabajo y garantizarnos un buen resultado final.
Con la masilla para madera emplastecemos, es decir, rellenamos las grietas, agujeros o cualquier otro tipo de desperfectos en nuestros muebles de madera. 

Muy importante a la hora de elegir la masilla para la madera es acertar con el color apropiado. Deberemos optar por el color más parecido al que tiene o tendrá el mueble sobre el que la estamos aplicando, de esta forma una vez seca la masilla y lijada, cuando apliquemos el tinte elegido, las zonas rellenadas con masilla para la madera serán más imperceptibles y por tanto el resultado final será más uniforme en cuanto al color y la zonas emplastecidas serán mucho menos evidentes llegando a pasar desapercibidas.

Existen varios tipos de masillas o emplastes:

Masilla al disolvente, compuesto normalmente con polvo de madera sobre una resina con base disolvente. Su ventaja principal es la rapidez de secado.

Masilla al agua, compuesto por polvo de madera mezclado con resina al agua. Cada vez son más usadas en detrimento de las masillas al disolvente por ser inocuos, por su buena capacidad de relleno y por la alta tolerancia a cualquir tipo de tinte para la madera.

Masilla de dos componentes, usados más a nivel profesional, están compuestos por polvo de madera y resina de poliester a la que debemos añadir un segundo componente o catalizador lo que les dá una extraordinaria dureza y rapidez de secado. Son ideales para reparar grandes desperfectos y grietas de la madera.

 

 

A la hora de ponernos manos a la obra, es muy importante valorar el tipo de superficie donde se ha producido el desperfecto y la profundidad del mismo, esto determinara el tipo de masilla a utilizar. Tras lo cual debemos elegir el color mas parecido al mueble en cuestión; si se trata de un mueble nuevo deberemos elegir el tono de la masilla lo mas aproximado al color del tinte que utilizaremos para dar el color.

La masilla para madera debemos aplicarla directamente sobre la madera con ayuda  de una espátula rellenando totalmente el hueco a reparar y  retirar el exceso de producto, esperamos a que esté bien seco y lijamos hasta dejar la superficie totalmente lisa y suave.